martes, 27 de marzo de 2012

Hablemos de The Killing – Reseña temporada 1


A pocos días del comienzo de la segunda temporada de esta serie, me pareció oportuno “refrescar” la memoria con una reseña sobre la primer temporada. No sé si terminará siendo tal, porque pretendo que el que no la vió, al leer lo siguiente, le dé una oportunidad. Con spoilers eso se va a complicar. En fin, los invito a meterse y veamos juntos que sale.




The Killing, que sale al aire nuevamente a partir del domingo 1 de Abril, trata sobre, como su nombre lo indica, un asesinato. Si, así de simple (o más bien, complejo). Ya se ha hablado de su parecido con Twin Peaks (de 1990, acá conocida como Picos Gemelos) y con razón. Esto se evidencia en un principio con el poster promocional (de ambas) que muestra a la chica asesinada en un primer plano. Si, una es en color, la otra en blanco y negro, etc., pero el parecido es notable. Para “coincidencia” mayor también tenemos la frase “Who Killed……..…” (complete la línea de puntos con Laura Palmer o Rosie Larsen según corresponda). La realidad es que nos recuerda a Twin Peaks por varias razones de las cuales ya se habrá hablado y no es el tema que nos compete hoy. Además esta es en realidad una remake de la serie danesa Forbrydelsen. Por supuesto, funcionará o no al margen de esto. El gran público está en USA y es ahí donde prácticamente no miran nada de “afuera” y menos si no está hablado en su idioma.
Para crear el clima, el relato se ambienta en Seattle. Creo que la elección no pudo ser mejor. Un invierno en esa ciudad, gris, nubosa, lluviosa, fría. Opresiva. Triste. Angustiante. El escenario es fundamental en lo que a golpe de efecto respecta. Y al ser remake, tienen que darle un contexto adecuado para que el “ambiente” se respete. Si cuando miramos Mad Men se nos llena la casa de humo, cuando miramos The Killing se nos inunda (tanto de agua como de lágrimas).
La protagonista, detective Sarah Linden (Mireille Enos  cuyo personaje curiosamente es odiado por mucha gente), está a punto de mudarse a la otra punta del país con su nuevo prometido (el "Cylon" Callum Keith Rennie, mas cylon que nunca últimamente porque lo vemos en tooodas partes). Obviamente, justo el día anterior a irse y ya con reemplazo asignado (Joel Kinnaman) le cae el temita de la desaparición y luego confirmación de muerte de la adolescente Rosie Larsen (Katie Findlay). A partir de ahí, es todo cada vez más cuesta abajo. La desesperación de la familia no tan perfecta de Rosie, el caos y falta de recursos de la policía, los sospechosos que no son, la (errónea) justicia por mano propia, la campaña política que justo se está llevando a cabo en la ciudad y de la cual no se sabe quién está más sucio,  sumado a los problemas personales de cada uno de los detectives. En el caso de Sarah, madre soltera, con infancia complicada en hogares de acogida y orfanatos. Stephen, su reemplazo devenido en compañero, tiene problemas de adicción además de estar metido en otros asuntos turbios y no tener relación con su familia.

En todos los capítulos hay una nueva pista que seguir, algún tipo de revelación o prueba, que nos hace pensar que algo se va a resolver, y nos mantiene esperanzados, como a la propia Sarah, que termina por obsesionarse con el caso al punto de estar todo el tiempo con un pie afuera y otro adentro del avión (literalmente). Los capítulos van pasando y los descubrimientos que hacen son cada vez más terribles. Lo más probable es que no resuelvan nada, pero van dejando al descubierto miserias humanas de todo tipo y color. Asi que además de sentir angustia, tristeza y demás, también sentiremos BRONCA. Así, con mayúsculas.

Mención aparte para todo el casting de la serie. Desde la protagonista, la mencionada Mireille Enos hermética, fría y a punto de estallar, hasta los padres de la chica asesinada, con una interpretación magistral de Michelle Forbes y Brent Sexton que nos provocan todo tipo de sensaciones, pasando por el político con “consciencia social” (o no tanto?) interpretado por Billy Campbell, ninguno de los personajes tiene un rol menor y todos, salvo los muy raros pifies de casting de estos productos, están interpretados con la profundidad, y en este caso oscuridad necesaria.

No queriendo meter mucho spoiler finalizo diciendo que si te gusta el drama y el policial, debes darle chance. Entiendo que haya gente a la que le parezca muy triste o angustiante, traten de aguantarla un poco, pasen el primer capítulo (que es doble), y resistan. Una vez metidos en ESA ciudad, no van a querer salir…




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