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lunes, 31 de octubre de 2011

The IT Crowd - Nerds en el sótano de la empresa

Un sótano, dos nerds (Moss y Roy), chismes que atiborran los estantes y hacen mil referencias, una jefa (Jen) que cree ser normal, pero también es nerd. Una empresa cuyo jefe es un miserable acosador sexual en el que nos parece ver algo de todos los jefes conocidos.

Y humor, un humor socarrón, referencial, geek, generacional.

Estas son algunas de las cosas que nos ofrece la sit com The IT Crowd, creación del brillante Graham Linehan y autor de la estupenda Father Ted, ya mencionada en Celesteland.

Producida también por Channel 4 comenzó sus emisiones en 2006 en Reino Unido y desde su nicho de público específico (treintañeros con estudios, en su mayor parte) la serie ha ido ganando estatus de producto de culto con amplia difusión vía pirata y DVD por buena parte del mundo, creciendo poco a poco a medida que la lista de chistes que sus seguidores nos sabemos de memoria se alargaba progresivamente.

Frases como esta del jefe supremo de la empresa en la que "trabajan" los protagonistas:

"Cuando empecé, sólo tenía dos cosas: mis sueños, y cincuenta millones de libras", y que sitúa bien al jefe de la empresa en su universo, sin contacto con la realidad del resto, de nosotros que lo vemos, y que muestra el talento de Linehan para dejar las cosas en su sitio sin necesidad de ser agresivo, pero sin dejar de hacer reír.

The IT Crowd, al contrario que Father Ted, no es una serie demasiado regular, pero sí nos ha proporcionado momentos de gran frescura y brillantez con hallazgos humorísticos muy superiores a cualquiera de la -posterior y mucho más blandita- The Big Bang Theory. Su llegada cubrió un hueco para un tipo de humor que aún estaba poco explotado en televisión en aquel entonces: el de la auto-referencia a la cultura basura y el mantillo pop que ha acunado la adolescencia de buena parte de nosotros, treintañeros occidentales.

Sus dos personajes principales son gradaciones distintas de la especie nerd, y el tercero, la Mujer Del Mundo Exterior (al sótano), acaba viendo su personalidad inevitablemente transformada en el estilo de los dos protagonistas y al que ella ya pertenecía, aunque en principio no lo supiera y aunque le cueste convencerse de ello (el espectador lo asume enseguida).

Nunca dejamos de sentir simpatía por ellos.

Por comparación, el jefe de la empresa (y que es interpretado por dos actores distintos a lo largo de las cuatro temporadas que llevamos) es una criatura repulsiva, y cualquier otro habitante del Mundo Exterior es soso, aburrido, carente de interés.

En el sótano de Moss, Roy y Jen se está mucho mejor. Es un ecosistema peculiar donde chistes que fuera de él no tendrían ningún sentido aquí sí nos hacen gracia. Un lugar donde la lógica imperante fuera (el gusto por el fútbol, la caza de chicas un sábado por la noche, las promociones profesionales) es retratada como un código sin sentido que estorba el budismo nerd de nuestros personajes, y que los hace especiales, no simples vehículos de gags disparados mecánicamente, como pasa a menudo en las sit com sin personalidad.

The IT Crowd, que se encamina a su quinta y última temporada, cierra bien un ciclo en el que nos hemos sentido de maravilla en el sótano de esa empresa con esa gente rara. Nos hemos sentido como en casa.

lunes, 24 de octubre de 2011

Father Ted: Recuerdo de una brillante sátira irlandesa


Imagínense este argumento:

En nuestro días, tres obispos visitan una isla. El propósito de su visita es evaluar cierta reliquia presente en el lugar para decidir si se la asciende de reliquia clase 3 a reliquia clase 2. Esto es muy importante para la parroquia local, porque una reliquia de clase superior significa más peregrinos y, con ellos, más dinero.
Al cabo del capítulo, el destino de los tres obispos es el siguiente:

Uno deja la Iglesia y se va a la India a fumar porros. El segundo muere. Y el tercero se va en camilla... con la reliquia (un pedrusco de singular tamaño) metida por el culo. Sí, exactamente.

¿Y esto? ¿Se emitió en alguna cueva de ateos radicales, es obra del inefable e imprescindible Ricky Gervais y está prohibida en Alabama?

Lo último no lo sabemos y hasta es posible que sea verdad, pero lo demás es totalmente al revés. Father Ted se emitió principalmente en Reino Unido y fue un éxito total (aún lo es)...¡en la católica Irlanda!

Todo empezó con un genio llamado Graham Linehan y su compañero Arthur Mathews.

Linehan es hoy conocido por su trabajo con la serie de culto The IT Crowd, divertida e imprescindible referencia del universo friki y nerd, y de la que hablaremos en el futuro.

Pero antes, en una explosión de humor sostenido y deslumbrante, estuvo Father Ted.

Producida entre 1995 y 1998 por la británica Channel 4 (a la que tantas cosas buenas le debemos, y de la que deberíamos hablar mucho más), Father Ted fue una comedia que tomaba de base una parodia sobre tópicos de vida irlandeses para arremeter, con un talento ilimitado, contra casi cualquier cosa de las que no se pueden criticar en muchos otros países (Iglesia, medios, matrimonio, ponga usted el etc).

Supongamos que desdoblamos a Homer Simpson en tres personajes: borracho, idiota y aprovechado deshonesto. Cada uno de los tres es uno de los personajes principales de Father Ted, 3 curas que viven juntos en compañía del ama de llaves más fea de la galaxia (y obsesionada con hacer beber te a todo el mundo, sea como sea).

Todos habitan un lugar llamado Craggy Island que viene a ser una versión diminuta pero completa de Irlanda, y el universo está

poblado por curas que hacen cosas de curas. Hay chat lines de curas, competiciones de curas, entregas de premios al mejor cura, curas perdidos en la sección de lencería más grande de Irlanda, y así hasta el infinito.

Pero no se vayan a creer que la serie es una sucesión de rezos, nada más lejos de la realidad. Es decir, la mayor ambición de Ted es abandonar Craggy Island y a su gente, a la que no soporta, y establecerse en una parroquia rica de Los Ángeles, con piscina.

Entre capítulo y capítulo, asistimos a una constante demolición de todo lo que identifica a la católica Irlanda. Desde su clima hasta sus instituciones y costumbres.

El único matrimonio que vemos persistentemente aparenta su unión frente a Ted para torturarse salvajemente cuando él se da la vuelta, las apariciones de la virgen son dibujadas con trazo infantil por uno de los curas con un rotulador, dos viejas acaban en la cárcel tras pelearse por ver quién paga la cuenta, y así una secuencia detrás de otra.

En Irlanda, el show se repone sucesivamente con un éxito que parece no agotarse, y muchos de sus hallazgos cómicos los encontramos repartidos en otras producciones más conocidas, desde The Simpsons hasta How I Met Your Mother, siempre convenientemente aguados y rebajados en sumisión a las necesidades de la censura mainstream que nos gobierna.

Si quieren ustedes reírse bien a gusto y aprecian la comedia sin miedo, les aconsejo fervientemente que visiten Father Ted y
descubran la ilimitada capacidad irlandesa para tomarse a broma sus emblemas más sagrados, capacidad de la que muchos podríamos aprender.

Recuerden que las cosas no siempre son lo que parecen. O sí. Como dice uno de los personajes en la serie:

"Tienes razón Ted. Nosotros no somos fascistas. Los fascistas son unos tipos que visten de negro y le dicen a todo el mundo lo que tiene que hacer".


 
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