He leído en algunos medios y blogs que
la vuelta de The good wife a las pantallas en su cuarta temporada
había sido correcta pero no brillante. Perdónenme, quizás me ciega
el amor, pero para mi The good wife es brillante en un 90% de las
ocasiones y esta ha sido una de ellas.
Si parecía que al inicio de la
temporada pasada Alicia se había liberado, yo la veo más liberada
aun al comenzar esta cuarta; se ha despojado de todo tipo de corazas
y ya no tiene problemas en expresar pensamientos y sentimientos sin
dejar de ser ella misma. Esto no quiere decir que ahora nos vaya a
contar su vida ni que se vaya a despendolar; simplemente habla sin
ningún tipo de tapujos sobre su separación, su posible
reconciliación o acercamiento, la carrera política de Peter o sus
infidelidades (las de Peter, se entiende).
Pero tal y como terminó la temporada
pasada con esa escena final llena de tensión e intriga, Alicia pasa
a un segundo plano y lo realmente importante era saber qué iba a
pasar con Kalinda y quién estaba detrás de esa puerta. El capítulo
retoma la escena final de último episodio de la tercera y nos
muestra a Kalinda a punto de enfrentarse a su pasado; y lo afronta a
la manera de Kalinda: a golpes y sin perder el estilo ni un minuto. Y
es que, ya lo he dicho más veces, el verdadero título de The good
wife debería ser “Don’t mess with Kalinda”. Siento debilidad
incontrolada por ese personaje, discúlpeme el lector.
Volvamos a Alicia. La señora Florrick
tiene que enfrentarse a las consecuencias de seguir siendo la señora
Florrick y en esta ocasión es un abuso de poder por parte de un
policía que se complica y se termina mezclando con política y en
medio de todo ello casi consiguen que Peter me caiga bien. Quizás,
algún día…¿quién sabe? El caso es que no se si es la política
o Chicago como escenario pero todo daba una imagen de gangsters y
mafias, corrupción, chantajes y demás…Algún día hablaremos de
Chicago...
Y en este entorno cada vez más
alterado se masca de fondo la crisis mundial en la que está envuelto
el mundo. El bufete ya no va tan bien y se están viendo en la
necesidad de despedir gente para ahorrar costes y poder sobrevivir,
laboralmente hablando, se entiende. Probablemente esta trama sea la
menos interesante de la serie pero ayuda a conocer y reforzar más
los personajes de Will y, sobre todo, Diane y la relación que hay
entre ambos.
En medio de esa relación laboral se
encuentra Cary, recientemente reincorporado a su antiguo bufete y que
vuelve a pertenecer a “los buenos”. Si queréis que os diga la
verdad, aun no he decidido si me gusta más este Cary, amable y
predispuesto o el Cary rencoroso y cabroncete de cuando trabajaba en
la oficina del fiscal del distrito y odiaba todo lo relacionado con
Lockhart&Gardner. Cary como enemigo gana muchísimo como
personaje. Habrá que encontrarle algún entretenimiento.
Ha vuelto The good wife y yo soy un
poco más feliz: el marido de Kalinda, la campaña de Peter y la
vuelta al trabajo de Will marca el inicio de la cuarta temporada de
la serie. Pronostico (y deseo) más protagonismo para Kalida, que la
temporada pasada estuvo bastante desaparecida, salvo en los momentos
finales; un paso, ya sea hacia delante y hacia atrás, en la relación
entre Alicia y Will, y bastante presencia de la campaña política de
Peter, aunque eso me haga quererle un poco.
Estamos de enhorabuena porque ha vuelto
la serie mejor escrita del momento.
Me gusto mucho el manejo de la música, con esa canción ridicula. Kalinda metiendose en esa relación abusiva y ver como de verdad no sabe como safarse.
ResponderEliminarEstoy en la minoría, pero este es mi show favorito del Domingo
Hola... en Argentina ya empezó la 4ta temporada?? No la publicitan para nada!
ResponderEliminarSi es que empezó, ¿en qué días y horarios la pasan, por favor?
Gracias!!
Gus